¿Alguna vez te has preguntado cuales son las principales diferencias entre el jamón y la paleta? ¿Cuál es tu favorito?
Pese a que las dos se elaboran de la misma manera, ya que ambos siguen el mismo proceso de salazón, secado y maduración, entre estas piezas existen una serie de diferencias, y en el post de hoy te las vamos a explicar.
La principal diferencia es la parte con la que se elabora: El jamón, se elabora con las patas traseras del cerdo, mientras que la paleta se elabora con la parte delantera, esto, provoca una gran diferencia en el tamaño y en el peso de ambos. Los jamones son más largos, anchos, redondeados y grandes que las paletas, lo que provoca que estos sean más pesados, ya que estos suelen pesar en torno a las 7-9kg e incluso en ocasiones, todavía más, mientras que las paletas rondan en torno a los 4-5kg, ya que su figura es mucho más delgada.
En relación a las diferencias entre el sabor de ambos, aunque sean muy sutiles, hay diferencias, por lo que el sabor es un factor influyente a la hora de adquirir uno u otro. Nosotros no podemos decir cual de los dos tiene mejor sabor, ya que para esa pregunta hay tantas respuestas como experiencias degustativas. El jamón ofrece un sabor más complejo y variado, gracias a que el tiempo de curación de este es mayor, y a que las distintas partes del mismo tienen diferentes matices, sin embargo, la paleta tiene un sabor más intenso.
Otra diferencia que podemos encontrar entre ambos productos es el rendimiento, ¿cuánta carne podemos obtener de cada uno de ellos? En la paleta, tanto la porción de grasa como de hueso es mayor, ya que el omoplato ocupa una superficie importante de producto, por lo que la proporción que se puede obtener de carne es menor. Para extraer sus finas lonchas se requiere más experiencia y destreza que con el jamón, ya que este permite obtener lonchas más grandes y anchas. En el jamón la grasa es menor, así como el hueso, ya que el hueso que se encuentra en el mismo es más estrecho, lo que provoca que la cantidad de carne sea mayor.Por eso, habitualmente la paleta es más barata que el jamón, ya que lógicamente es más pequeña y ligera y su precio por kilo suele ser menor, ya que necesita menos tiempo de curación que el jamón, no porque la calidad sea inferior.
Otra gran diferencia, es la curación, nuestro jamones tienen una curación mínima de 18 meses y puede llegar hasta los 36 meses, dependiendo del tipo de animal, y del peso del jamón en fresco, ya que cuanto más grande y grasa contenga, más tiempo será necesario para que alcance el grado de curación óptimo. La paleta, sin embargo, tiene un tiempo de curación que suele variar entre los 12 y los 24 meses de curación, dependiendo de los mismos factores que en el caso del jamón.
Aunque ambos productos cuenten con un elevado nivel de excelencia y calidad, nosotros recomendamos que la elección entre jamón y paleta venga dada por los gustos y estilo de vida del consumidor. Si las personas que van a consumir el producto son pocas, es más interesante comprar una paleta, ya que al ser más pequeña, se acabará antes, por lo que no dará tiempo a que se seque. Si lo que buscas es precio, opta por una paleta, ya que estas suelen ser más baratas que el jamón. Si por otro lado, lo que buscas es sabor, el jamón ofrece sabores más matizados en función de la parte que se consuma, y más suaves, mientras que en la paleta el sabor será más intenso y uniforme, al estar la carne más cerca del hueso.
Teniendo en cuenta estos factores y las diferencias entre ambos productos, valora que es lo que estás buscando y elige tu producto favorito, ya que nosotros no pensamos que una opción sea mejor que la otra, ya que en todos nuestros productos apostamos por la máxima calidad, y los elaboramos con el mismo mimo y delicadeza.